Convirtiéndose ya en tradición por Navidad, el Colegio Oficial de Graduados en Ingeniería de la rama Industrial e Ingenieros Técnicos Industriales de Cádiz (COGITI Cádiz) repartió el pasado 27 de diciembre su solidaridad entre cinco asociaciones benéficas gaditanas en un emotivo acto que tuvo lugar en el Casino Gaditano.
Las entidades beneficiarias de este regalo realizado por los Ingenieros Técnicos Industriales gaditanos fueron Cáritas Jérez, la Asociación de Reyes Magos de Cádiz, el comedor social Valvanuz, la ONG Museke y Madre Coraje. Al acto acudieron varios representantes de las asociaciones, así como por varios profesionales de COGITI Cádiz presididos por su decano, Domingo Villero, quien tomó el primer turno de palabra antes de realizar la entrega del donativo a las asociaciones benéficas. “El ver la labor que hacéis, el poder ayudar aunque sea mínimamente, y ojalá fuese con mucho más, me emociona. Lo que me gustaría es que esto se pudiera visualizar a la sociedad; no porque lo haga nuestro colegio sino porque esto sea la punta del iceberg. Que sea una asociación, un colegio, muchas asociaciones, toda la sociedad en general, la que se vuelque con esa labor que vosotros hacéis de una manera tan respetable, tan honrosa y tan encomiable. Estoy convencido de que este pequeño donativo del que hoy hacemos entrega va a servir de mucho. Me he emocionado, mis compañeros están ahí callados pero la profesión va por dentro, y simplemente por eso, desearos el mejor desempeño que realizáis en vuestra acción que, desde luego es magnífica, muy necesaria. Estos años de crisis han hecho que realmente hoy podáis sacar pecho y podáis sentiros orgullosos de todo lo que hacéis altruistamente, y que a todos nos hace sentir tan orgullosos”.
Desde el comedor social Valvanuz agradecieron el gesto de COGITI Cádiz e hicieron un repaso de la utilidad que harán del mismo dentro de sus labores. “Los voluntarios que tenemos hacen suya la labor realizada como algo cotidiano; las cenas a las ocho de lunes a viernes, los pagos de los recibos de luz y agua, ayudas para comidas, para los más pequeños. Y después también tenemos el roperío; vamos juntando ropa y clasificamos aquella que se puede usar para repartirla. Por eso os damos las gracias por esta ayuda que recibimos. Nuestra fundación fue fundada en 1983, hace muchos años ya luchando con los pobres y las personas sin hogar. Por ello estamos dispuestos a ayudar en todo lo que necesitan para, por lo menor, cubrir sus necesidades básicas”, relataron Mila Aragón e Ignacio Ollo, como portavoces de Valvanuz.
Por su parte, Carmen Gil, representante de la Asociación Museke, recordó que “todas estas cosas que dicen ser pequeñas son las que cuentan porque muchas pequeñas cosas así forman algo grande. Nosotros trabajamos en Ruanda, en el contexto de todos esos países africanos, pero cuando llegamos nos dimos cuenta de que Ruanda era diferente, con mucha pobreza. Tenemos allí un centro de formación de costura y queremos abrir una peluquería. De los niños en extrema pobreza, son pocos los que van a la universidad y el resto deben hacer formación profesional, sea de peluquería, costura o mecánica. Nosotros estamos luchando para que se pueda avanzar y realmente somos afortunados por realizar esta labor. Y aunque sea un trabajo duro, es muy gratificante”.
Desde Cáritas San Rafael, en Jérez, hicieron un repaso de los puntos fuertes de la entidad en uno de los barrios jerezanos más castigados por el desempleo y la pobreza. “Realizamos servicios de formación, de alimentación, promoción, sobre todo de la mujer, porque las mujeres son los pilares de sus casas y sacan a sus hijos adelante, y les ofrecemos formación; también tenemos acompañamiento de búsqueda de empleo y aportamos nuestro granito de arena en todo lo que se pueda. Unas veces más, otras menos porque, por desgracia, hay mucha demanda no solo de alimento, sino también de suministros. Pero entro todos echamos una manita hasta donde podemos llegar así que con este donativo intentaremos paliar los agujeritos que podamos”, concretó Lourdes Barra.
Desde la Asociación de Reyes Magos de Cádiz hicieron especial hincapié en el esfuerzo por lograr que “ningún niño de Cádiz se quede sin juguetes el 6 de enero. Porque, como yo digo siempre, si un niño está esperando el día de Reyes, se levanta y se encuentra todo vacío, pierde toda la ilusión; qué ilusión le puede quedar a un niño después de ese día. Nosotros, desde el año 1995, intentamos que esto, no ocurra, y la mayor satisfacción es pensar que la ilusión de un niños, por lo menos ese día, sea dulce y se convierta en felicidad”, concretó Antonio Tello.
Finalmente, cerró con sus palabras las intervenciones, el representante de Madre Coraje, Jaime Rocha, subrayando la “sensibilidad” demostrada por COGITI Cádiz con este gesto. “Para nosotros es digno reconocer el corazón que ponéis ya que este gesto se repite en los años. Nosotros intentamos ayudar en Mozambique, en Perú, pero también trabajamos aquí con huertos ecológicos en Jerez que sirven para distribuir alimentos en varios comedores sociales de la bahía de Cádiz. Además de la entrega de alimento y ropa que se hace a personas gaditanas que lo están pasando muy mal y que nosotros vivimos día a día”.
