La primera reunión tuvo lugar el pasado 24 de septiembre, en el Ministerio de Economía y Competitividad, donde José Antonio Galdón y el asesor jurídico del COGITI, Ramón Entrena, se entrevistaron con el Director General de Política Económica, Ignacio Mezquita Pérez-Andújar. En el citado Anteproyecto se indica una lista de profesiones de colegiación obligatoria que sólo podrá exigirse por ley estatal. En lo que respecta a las profesiones técnicas, se establece la colegiación obligatoria para los profesionales que realicen actividades para las que se exija visado (nueve actividades en el ámbito de la edificación y el manejo de explosivos, fundamentalmente).
En este sentido, José Antonio Galdón explicó al Director General que una de las principales alegaciones presentadas por el COGITI se refiere a la ampliación de la colegiación obligatoria a todo el ejercicio de la profesión, y no a actividades concretas de la misma; así como la improcedencia de la acreditación por parte de ENAC (Entidad Nacional de Acreditación) para la certificación del DPC (Desarrollo Profesional Continuo) de los profesionales, al tiempo que insistió en la necesidad de la verdadera reforma de los servicios profesionales, y la eliminación de barreras absurdas basadas en el uso y no en la competencia técnica.
Ignacio Mezquita, que escuchó atentamente las propuestas del COGITI, se comprometió a ampliar la información en esta materia, para poder estudiar todo lo tratado más detenidamente. Además, acordaron convocar una reunión en fechas próximas.
Por otra parte, en línea con este encuentro, el pasado 30 de septiembre tenía lugar otra reunión en el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, esta vez con el Subsecretario de Industria, Enrique Hernández Bento. En esta ocasión, el Presidente estuvo acompañado por el Vicepresidente del COGITI, y Decano del Colegio de Ingenieros Técnicos Industriales de Aragón, Juan Ignacio Larraz, quienes les presentaron también las alegaciones al Anteproyecto de Ley de Servicios y Colegios Profesionales.
Además, al tratarse del Ministerio de tutela de la profesión, le plantearon la idoneidad de establecer los cauces necesarios para lograr la interlocución directa y continua con el mismo. El Subsecretario se mostró muy receptivo a todo lo planteado por el COGITI, y partidario de que la comunicación con el Ministerio sea lo más fluida y directa posible.